En este reportaje analizamos los puntos fuertes y alguna zona vulnerable del Unicaja, quinto clasificado de la ACB con 18 triunfos, rival de este jueves del Fuenla (19.15 horas en el Marín Carpeta, en Málaga)
FUENLABRADA/9 de MAYO de 2019. Una foto panorámica del equipo: el Unicaja, como equipo, no es un 10 en nada. Pero es un bloque muy consistente. Notable en algunas facetas del juego.
Tiene rasgos de equipo grande, en el sentido de que su anotación está muy repartida y proporcionada (hablamos del cuarto equipo más anotador del campeonato, con 83,80 puntos por partido) tras el Real Madrid, el Regal Barcelona y el Kirolbet Baskonia). Flojea más en defensa (es la octava mejor del campeonato; encaja 82 puntos por partido).
Se nota, en cualquier caso, la mano de Luis Casimiro en la dirección técnica. El entrenador manchego (que puede presumir de haber logrado una liga con el TDK Manresa -en la temporada 1997-98-y de haber hecho campeón de la Supercopa al Herbalife Gran Canaria, en el curso 2016-2017) es un clasicazo de la liga. Un gran motivador de jugadores y un estratega confiable, que maneja tanta riqueza táctica como optimización de los recursos que tiene.
No es casual que haya entrenado a 11 equipos diferentes en la ACB, algunos en varias etapas, como el Baloncesto Fuenlabrada; este curso, ha logrado que el Unicaja componga uno de sus cursos más regulares de los últimos años. En la previa del encuentro, ha hablado de las bajas que tiene el equipo (Dani Diez y Carlos Suárez), ambos ala-pivot, que están mejor pero todavía no para jugar.
No obstante, el técnico manchego recupera a Ryan Boatright. Sobre el Fuenla, ponderó que “hay que guardarle el máximo respeto, porque tiene gran capacidad ofensiva y es bueno defensivamente”.
Por su parte, el Montakit Fuenlabrada acude a la cita con la única baja de Álex Llorca. El base del Baloncesto Fuenlabrada, Tomás Bellas, ha valorado el encuentro de la siguiente manera: “Unicaja tiene un equipazo pero tendremos nuestras opciones. Haremos todo lo posible por defender con energía y correr, que es un estilo que nos está dando buen resultado”.
El crack nacional y del equipo: Jaime Fernández; 11,8 puntos y 4,4 asistencias, para 14 de valoración (segundo máximo anotador español de la liga, tras Sergio Llull, y decimocuarto de la ACB este curso). Un base reconvertido en killer escolta, que anota más que nunca gracias a su puntería y recursos para entrar a canasta, aunque no ha olvidado su generosidad y destreza para asistir.
Emblema del equipo: Giorgi Shermandini: 12,8 de valoración del encuentro, con 9,8 puntos y 4,8 rebotes por velada. El gigante georgiano 2,17) armoniza agilidad y fortaleza bajo los aros. Es uno de los pívots más resolutivos en la pintura (faceta que parece en peligro de extinción en este tiempo) y un cheque al portador para sumar producción bajo los aros.
El jugón: Brian Roberts; 10,3 puntos y 3,3 asistencias por encuentro. Tira bien, pasa bien y finta y penetra mejor. Uno de los bases más eléctricos y versátiles de la liga.